La ciudad púnica de Cartago contaba con dos grandes puertos unidos.
El primero de ellos, de forma rectangular, era el puerto civil, donde fondeaban las naves comerciales.
El segundo puerto, era el militar, de forma circular. En su interior tenía un islote donde se situaba la sede del almirantazgo. Según las descripciones de Apiano, este último puerto podía llegar a albergar hasta 200 naves.
Por encima de los diques, que podían tener sobre todo la función de astillero naval, se situaban las dependencias destinadas al almacenaje. Gracias a estos dos puertos, Cartago llegó a dominar el Mediterráneo occidental.
Tras las guerras púnicas, y ya en manos del imperio romano, el Puerto de Cartago resultó vital para la exportación de cereales africanos hacia Roma. La ciudad llegó a ser la segunda en importancia de todo el imperio, con alrededor de 400.000 habitantes.
Recreación infográfica: